lunes, 23 de enero de 2012

El lado oscuro del cielo. Capitulo 1

Capitulo 1
Un dia cualquiera

Una luz cegadora se filtró por la ventana despertándome de mi dulce sueño. Miré el reloj. Las 7 y media de la mañana, hora de levantarse para llegar a tiempo al instituto. 
Como siempre lo primero que hice al despertarme fue mirarme el espejo que estaba a una lado de mi gran blanco armario. Toda las mañanas hacía lo mismo y todas las mañana me desanimaba ya que veía a una leona en vez de a una chica de 16 años, pero era un buen método para levantarme antes ya que si no lo hacía no me daría tiempo a arreglar esa mata de pelo y poder llegar pronto a clase. Entré en el armario y empecé a rebuscar entre la ropa. Por fin, tras diez minutos decidí lo que me iba a poner. Cogí unos pantalones vaqueros con un cintura plateado, una camiseta con la bandera de Inglaterra, unos calcetines blancos y mis converse rojas. Después de vestirme me fui al baño, hice mis necesidades y me peiné y planché mi enredado pelo. Después bajé a desayunar. Mi madre me había preparado mi vaso de leche con colacao, como todas las mañanas, y luego yo cogí unas galletas de la despensa. Subí a mi cuarto, me lavé los dientes, cogí mi pesada y gigantesca mochila y bajé las escaleras a esperar a que mi amiga Ángela me tocará al portero para irnos juntas al instituto. 

Todos los días era la misma rutina. Siempre la misma, aburrida y repetitiva rutina. Estaba pensando en un problema de mates que teníamos que hacer para ese día cuando tocaron a la puerta.

- Mara !!!! Cómo te has levantado esta mañana??? - me preguntó con entusiasmo una de mis mejores amigas (no se como hacía eso de estar por las mañanas tan feliz y con tanta energía) 
- Pues igual que todas las mañanas, con sueño que me caigo- le dije yo mientras daba un gran bostezo.
-Bueno... ¿Nos vamos?-me preguntó ella.

Ángela es una de mis mejores amigas. Es más baja que yo y era rubia y con ojos azules como los ángeles, de ahí su nombre. Además es la amiga más positiva que podías tener. Siempre va vestida con algún forro o capucha y en invierno siempre llevaba puestos sus guantes negros con cortes en los dedos. Estaba un poco loca pero eso es lo que me gustaba de ella. 


Yo, en cambio, era morena y con ojos marrones. Soy, junto con Ángela, una de las chicas más bajas de mi curso. Llegaba al metro sesenta de milagro pero tengo una buena figura, no me quejo. Era la típica española solo que yo soy la más inteligente de mi clase, ya que algún día quería estudiar medicina. Aunque me llame Tamara me suelen llamar Mara.

Llegamos al instituto diez minutos después. Era miércoles por lo tanto teníamos física y química a primera hora. Nuestro instituto era uno de los más grandes de la ciudad pero también uno de los más cutres pero era el más cercano a mi casa. Cuando llegamos a la clase nos encontramos que casi todos nuestros compañeros había llegado. Entonces Juan, nuestro mejor amigo, se acercó a nosotras:

-¿Qué tal estáis chicas? Mara me vas a tener que chivar los ejercicios si a Juana se le ocurre preguntarme. Si empieza por el principio de la lista seguro que me toca- nos dijo Juan

Juan era mucho más alto que nosotras dos. Nos sacaba por lo menos 2 cabezas pero era muy simpático y además era bastante mono. Era moreno pero lo más característico de él eran sus ojos. Tenía unos preciosos ojos azules que derretían a cualquier chica, pero nosotros solo éramos amigos aunque últimamente estábamos mucho tiempo juntos y Ángela siempre estaba haciendo bromas sobre el tema.

-Ok. Algo te diré y ahora tira que ya estará a punto de venir la maestra y te va a echar otra vez de clase por estar charlando con nosotras- le dije 
-Nosotras tenemos una buena reputación entre los maestros y no queremos que una mala influencia como tú nos la estropee-bromeó Ángela.

Nos sentamos las dos en nuestros sitios respectivos, y Juan se sentó detrás de nosotras. A cambio de estar detrás de nosotras, Juan tuvo que sacrificar el hecho de poder estar con un compañero al lado pero, ¿a quien más podría necesitar teniéndonos nosotras dos delante?

Justo en el momento en que sacaba el archivador el maestro de matemáticas, nuestro tutor, entró por la puerta. Lo primero que me imaginé fue que el maestro se había enterado de que José, uno de los chicos que estaba en mi clase, se peleó con un chico de 1º de bachiller la tarde anterior, pero me sorprendió el por qué estaba ahí esa mañana. 

-Buenos dias chicos. Hoy he venido tan temprano porque ha llegado un nuevo compañero y hemos decidido entre todos los tutores de 4º que esté en nuestra clase- nos informó el tutor-Espero que seáis respetuosos con él ya que es italiano y a veces se equivoca con nuestro idioma.

Nunca olvidaré el momento en que sus ojos azueles como el hielo se posaron en los míos. Nunca olvidaré la primera mirada que compartimos Daniel y yo.



 Bueno esta es una historia a la que le llevó mucho tiempo dando vueltas a la cabeza. Espero que la comentéis y que si os gusta pidáis más capítulos. Además de esta y alguna otra historia de mi propia invención publicaré algunas reseñas sobre los libros que vaya leyendo ademas de alguna en que otra noticia sobre algunos libros y estrenos. Espero que me sigáis algunos el blog y si no pues me gusta escribir y estoy harta de que solo inventé historias para la clase de lengua y muchas de esas historias se queden en el olvido.
Pues solo era eso. Ya iré actualizando.♥♥♥


2 comentarios:

  1. Tripi? jajajaj pues esta bastante bien para ser el primer capitulo que haces :3
    De tu metal mortem :)

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  2. Thanks pauli!!!!

    Si tripi_98. XD
    No se me ocurria otro nombre y me gusto como sonaba con _98
    XD

    A ver si subo el segundo. :p

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